Los
cómics han sido desde su concepción un entretenimiento ante todo dirigido a
varones. Atendiendo a números, el público masculino siempre se le acercó más
que las mujeres, salvo en publicaciones realizadas en específico para ellas,
como las del género de romance. Asunto aparte es la gran producción japonesa,
que incluso tiene su propia categoría, el shojo,
realizado especialmente para mujeres jóvenes.
Un reflejo de esta situación se
presentó en los primeros años de la Mujer Maravilla, cuyos cuentos eran poco
menos que catálogos para fanáticos del sometimiento sexual (lo que llaman bondage).
Pero este es el siglo XXI, y cuanto
era “normal” o “inofensivo” hace unos años, hoy es motivo de escándalo, por sus
connotaciones contrarias a la igualdad entre géneros.
La muestra más reciente del cambio
en las actitudes fue la disculpa que la productora cinematográfica 20th Century
Fox emitió la semana pasada, luego de que grupos feministas y particulares se
quejaran por un póster de la cinta X-Men:
Apocalipsis, en el cual el villano que da nombre al filme ahorca a la
mutante Mystique, interpretada por la actriz de moda, Jennifer Lawrence.
“Hay un problema mayor cuando los
hombres y las mujeres en 20th Century Fox creen que la violencia casual contra
las mujeres es la forma de promocionar una película. No hay contexto en el
anuncio, sólo una mujer que es estrangulada. El hecho de que nadie reclamó por
esto es ofensivo, y francamente estúpido”, dijo la actriz Rose McGowan a la
revista The Hollywood Reporter.
La productora reviró en un
comunicado con disculpas y la promesa de retirar el anuncio: “En nuestro
entusiasmo por mostrar la villanía del personaje Apocalipsis no nos dimos
cuenta inmediatamente de la connotación inquietante de esta imagen ya impresa. Una
vez que nos dimos cuenta de qué poco sensible era, rápidamente tomamos medidas
para retirar estos materiales, Ofrecemos disculpas por nuestras acciones, y
nunca justificaremos la violencia contra las mujeres”.
Sí, los tiempos han cambiado. Pero el cambio
ya estaba aquí.
En marzo pasado, el dibujante Rafael
Albuquerque solicitó a la editorial estadunidense DC comics que retirara la
portada variante que hizo para el número 41 de la serie Batgirl. (Las portadas
variantes hoy son la onda en el cómic gringo: una historieta actualmente cuesta
más o menos según cuál de la varias tapas ofrecidas lleva)
La portada se inspiró en la historia clásica La broma mortal, en la cual El Joker (El
Guasón, para quienes crecimos con la serie de Batman de los sesentas doblada al
español) deja a Batichica discapacitada de
un balazo en la columna y según su autor, el dibujante Brian Bolland, incluso
la violó.
“Mi portada variante de Batgirl se diseñó
para ofrecer homenaje a un cómic que en realidad admiro, y que sé que es un
favorito de muchos lectores. La broma mortal
es parte del canon de Batichica [hasta hace unos meses, en que DC declaró que
ya no lo era más, por revisiones a la ‘historia oficial’ de su universo] y
artísticamente, no pude evitar presentar la relación traumática entre Barbara
Gordon [la personalidad civil de Batichica] y El Joker.
“[…] Respeto las opiniones en contra y, a
pesar de que la discusión es si fue correcta o no, ninguna opinión debe ser
desacreditada. Mi intención no fue jamás herir o inquietar a nadie con mi arte.
Por esa razón, le recomendé a DC que se retirara la portada variante”.
Y este no fue el primer caso. En agosto de 2014, la
editorial Marvel mandó a hacer una portada variante del cómic de La Mujer Araña
a Milo Manara, italiano célebre por sus historietas eróticas. La protagonista
aparecía en una pose muy difícil de lograr naturalmente, y en la que su trasero
se destacaba especialmente.
La controversia fue inmediata. Marvel replicó
publicando la imagen, pero con el título de la revista ocultando la pose del
escándalo.
“Si vas a convenciones y a tiendas de cómics, [ves]
que surgen más lectoras. Están ansiosas por hallar contenidos y buscan
contenido con el cual se puedan relacionar”, dijo Axel Alonso, director
editorial de Marvel a la revista electrónica www.comicsbeat.com,
la cual aseguró que actualmente el 47 por ciento de los lectores de historietas
de Estados Unidos son mujeres.
Sí, los tiempos cambian. Lo que antes se toleraba,
hoy no es aceptable. Y los cómics también reflejan el cambio de actitudes.
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