lunes, 25 de julio de 2016

Regresa La Conque – y se anuncia en San Diego



La Comic-Con International: San Diego, el evento de cultura popular más grande del planeta, se realizó este fin de semana, del 21 al 24 de julio. Hubo noticias de todo tipo para los aficionados a la historieta, los dibujos y el cine de todo el mundo, pero una en especial sacudió al medio comiquero mexicano, el regreso de La Conque, una de las más importantes convenciones del género en la historia, y la primera celebrada en la Ciudad de México, en 1994.

 Foto cortesía de Carlos Joey Moisés
 
            Se dio a conocer que el dibujante Jim Lee anunció que se publicarán en DC Comics los personajes del universo Wildstorm –creado en los 90s, cuando Lee y Todd McFarlane dejaron la editorial Marvel para fundar Image—, que se harán películas de dibujos animados basadas en las historietas Justice League Dark, El contrato de Judas y una cinta de Batman y la popular villana Harley Quinn, que Ghost Rider (El Motociclista Fantasma) aparecerá en la serie de televisión Marvel’s Agents of SHIELD, además que se presentó la armadura que portará Hulk, el hombre increíble en la película Thor: Ragnarok, y Rebecca Sugar, creadora de la popular caricatura Steven Universe se declaró bisexual, lo que explica las constantes referencias a la comunidad gay en la serie.
            Además, Peter Kuper ganó el Premio Eisner (vulgarmente llamado El Oscar de la historieta) al “mejor álbum gráfico nuevo” por Ruinas (publicado en México por la editorial Sexto Piso), una historia ambientada en Oaxaca, durante el conflicto magisterial y social de 2006.


            Por si fuera poco, se presentaron los tráilers (antes les llamábamos cortos) de los filmes inspirados en cómics Doctor Strange, Mujer Maravilla, y Liga de la Justicia, así como de los programas del servicio de televisión en demanda Netflix inspirados en historietas Marvel Los Defensores, Puño de Hierro y Luke Cage. Se informó que Brie Larson protagonizará la película de Captain Marvel, y que Sylvester Stallone estará en Guardianes de la galaxia Volumen 2 junto con su compadre Kurt Russel, su coprotagonista en la cinta Tango y Cash (Andréi Konchalovsky, 1989).


Brie Larson, la nueva Captain Marvel


            Pero lo que conmovió la escena comiquera mexicana fue el que La Conque se celebrará nuevamente del 5 al 7 de mayo de 2017 en el Centro de Congresos de la capital de Querétaro. Y el invitado especial será nada menos que Stan Lee, fundador del Universo Marvel, quien logró esa hazaña con los mejores dibujantes de principios de la década de 1960.
            Hicieron el anuncio Luis Gantus, quien encabezó al equipo que realizó las primeras ediciones de La Conque, entre 1996 y 2001; Humberto Ramos, el ilustrador que más y mejor ha dibujado profesionalmente al Hombre Araña, y como sorpresa, el mismo Stan Lee visitó el salón donde se ofrecía el aviso. Se indicó asimismo que asistirán los dibujantes Joe Madureira (X-Men, Battle Chasers), Agnes Garbowska (Mi pequeño pony) Jimmy Cheung (New Avengers), Sara Pichelli (Ultimate Spider-Man), Jimmy Palmiotti (Punisher), Matt Brooks (World War Z) y Sergio Aragonés (MAD).


            El dibujante Mudo Vázquez (creador de la historieta El Arsenal), asistente a la presentación, indicó entrevistado que el regreso de La Conque era “pocamadre, desde qué me dijeron hace un par de meses no dudé en ponerla como fecha importante en mi calendario”.
            Gerardo Sandoval, presentado en la Comic-Con como dibujante de la nueva serie del misterioso, violento personaje Venom, comentó que “el regreso de La Conque me parece la mejor noticia para los mexicanos que gustan de los cómics y no puedo esperar a saber la reacción de todos cuando conozcan la lista de invitados y el contenido del evento”.
            Ahora La Conque no sólo cuenta con el entusiasmo de su comité organizador, sino que tiene el apoyo del gobierno de Querétaro, que acoge al evento como un atractivo turístico más de esa bella entidad.
            En los próximos meses se ofrecerán noticias de La Conque en su muro de Facebook, y en la cuenta de Twitter @conquemx. Los boletos ya están a la venta aquí, y en este sitio puede verse el anuncio del regreso del evento.

 Foto cortesía de Carlos Joey Moisés

            Entre otros profesionales mexicanos del cómic, fueron a la Comic-Con Edgar Salazar (dibujante en la editorial estadunidense DC Comics), José Ladrönn (El Incal), el cineasta y guionista de historietas Carlos García Campillo, Adalisa Zárate (creadora de los cómics dibujados al estilo japonés Travelling Seers y Writer’s Block), Edgar El Pato Delgado (colorista en Marvel, creador de Ultraduck), Dono Sánchez Almara (autor de Turbo Desafiante y también colorista en Marvel), Jorge Tovalín (editor de la revista informativa especializada en historietas Comikaze), Elías Ortiz, organizador de La Mole Comic-Con y Carlos Joey Moisés, entusiasta del cosplay, la afición a confeccionar y vestir trajes que interpretan a personajes de historieta, fantasía y ciencia ficción. 



Profesionales mexicanos de la historieta en la Comic-Con International: San Diego. Atrás, Gerardo Sandoval (dibujante de Venom), Edgar Salazar (DC Comics) y Carlos García Campillo (director de la película Implacable); adelante, José Ladrönn (El Incal), Dono Sánchez Almara (Turbo Desafiante) y Mudo Vázquez (El Arsenal) Foto cortesía de Mudo Vázquez


lunes, 18 de julio de 2016

Mudo Martínez, cheves y cómics en Monterrey



Mudo Martínez, promotor, guionista, editor y dibujante de cómics con sede en Monterrey, Nuevo León, anunció recientemente que cesaba temporalmente sus labores en el centro cultural Central Fixión –aliado de la editorial Fixión Narradores, mismo que publica las geniales historietas Turbo Desafiante de Dono Sánchez Almara, Nómadas del Yermo de Raúl Treviño y Ultrapato, de Edgar Delgado—, para centrar sus esfuerzos en los festivales cerveceros.
Comencé de promotor con las catas, luego viajes a festivales, a cervecerías... mucho apoyado en mi experiencia de publicista, y cuando los cerveceros se dieron cuenta que podía dibujar pues empezaron (a hacerse) las etiquetas de cheve (solicitadas por productores). Ya llevo cerca de 15 etiquetas cerveceras y logotipos... Va haber más seguramente. Irónicamente mi carrera como ilustrador despegó en la cheve y no haciendo cómic (dónde me enfoqué en producción, edición, guion). Actualmente llevo unos 19 eventos de LocalCraftBeerMty, empecé con cuatro cervecerías invitadas y ahorita tengo un padrón de 35 cervecerías para ofrecerles fechas”, dijo en entrevista electrónica.



Señaló que los eventos de Local Craft Beer Monterrey se realizan en el Jardín del Tío Obispado, en el Centro de Monterrey, y se anuncian en su muro de Facebook,así como en su muro de Instagram. Adelantó que el próximo encuentro se realizará el 28 de julio.
Explicó que “el detalle de la cerveza artesanal es la variedad de sabores, texturas, olores que enriquecen la experiencia de un acto tan sencillo y democrático que es tomar cerveza. Sin la pretensión del vino, sin pegarle a la mamada. Por años un par de estilos genéricos dominaron la cerveza industrial, sin chiste más que ponerte pedo (y después de mucho consumo). Con la cerveza artesanal, es calidad sobre cantidad. Claro, uno que tiene el vikingo dentro pues sigo con chingos de cantidad pero con calidad”.


Mudo aclaró: “Yo no soy productor y no creo serlo nunca. Sí a lo mejor (en cosas que se van cocinando) puede que termine trabajando para una cervecería. Estoy involucrado básicamente en promover, tengo lazos con cervecerías gringas, nacionales, que me ayudan a promover el movimiento. Aparte a veces puedo figurar como consultor creativo con cerveceros en general y en lo particular. 
“Mi buena amistad con (la productora cervecera) Bracino logró que hicieran una cheve inspirada en mi cómic El Arsenal, en base a un estilo que siempre me ha gustado (Strong Ale) y que aunque no tengo injerencia en la receta, sí les comento como quiero que sepa. Y la verdad me gustó un chingo”.
Detalló que Palo Muerto Strong Ale, inspirada en El Arsenal, “tiene “un estilo que casi no se ve en México, sabor a caramelo pero balanceada con el amargor. Nivel de alcohol lo suficientemente fuerte para ponerte sabrosón sin noquearte. Es la cheveperfecta para un cómic con malas palabras, violencia y desmadre”.


Y si bien Mudo hoy pretende enfocar su esfuerzo en divulgar la cultura cervecera, no corta sus ligas con la historieta. Ya tiene un cuarto de siglo de partirse la madre haciendo buen cómic en Monterrey. Indicó que en 1992 conoció al cineasta y promotor de la historieta Carlos García Campillo “y de ahí se hizo la bola que eventualmente formó (la editorial) Cygnus. La amistad con Campz desembocó en co-crear (el cómic de vampiros) Lugo y publicarlo en 1996.
“Por ahí de 1997 conozco a Dono Sánchez, a quién de volada le ofrecí dibujar para nosotros (Producciones El Chango), y al terminar Lugo (ilustrado por Carlo Barberi, hoy estrella en la editorial estadunidense Marvel) inmediatamente nos pusimos a trabajar en lo que se convirtió en El Arsenal. Tengo una gran amistad con (el dibujante y colaborador del cineasta Guillermo del Toro) Pancho Ruiz Velazco y estuve en el génesis de Studio F, cuando junto con Pancho y sin un cinco ya (y yo andaba igual en esos días) fuimos a la Convención de Cómics de San Diego y él consiguió colocar (su historieta) BattleGods en (la editorial estadunidense) Dark Horse.


“En los próximos años él me convenció de que el camino para publicar era ofreciéndole los proyectos a los gringos. Y pues nos durante ese tiempo nos aventamos un proceso de hacer y rehacer el cómic hasta que llegó (la editorial) Arcana. Pasando la publicación del cómic en EU, tuve un poco de frustración porque no fue lo que yo esperaba (seguir publicando el cómic sin fin) por muchos problemas, ajenos y propios.”
Editor del proyecto "¡#$%&! Cómics con Guffo Caballero y Ricardo Cucamonga, que divulgó la historieta regia entre 2006 y 2008, Mudo siguió muy activo en la escena comiquera de Nuevo León, y eventualmente “fue mi compadre Guffo quien me presentó al que es mi compinche en proyectos cerveceros desde entonces, Eslem Torres”. 
“Fue hasta que conocí a Eslem que comencé a ‘tomarme la cerveza en serio’. En 2012 apenas si teníamos una tienda boutique de cerveza en Monterrey, de alguna manera Eslem aceptó que usará mi nombre para atraer gente (what the fuck? [¿qué chingáos?]) y resultó. Claro, con una gran base de amigos en un inicio hicimos las primeras catas de cheve. Al año ya nos andábamos animando a hacer un microfestival llamado LocalCraftBeerMty, que prácticamente se estrenó al mismo tiempo que las primeras cervecerías locales.” 
            Pero Mudo no dejará el cómic: “Para nada. Apartarme de Central Fixión sólo es para darme el respiro y construir/cosechar en mi ‘otra’ carrera. Ese respiro también se refleja en que por fin podré continuar con El Arsenal y ya tenemos dos meses trabajando en la preproducción semanalmente junto con Esaú Figueroa (recuerden ese nombre, que dará de que hablar. Es un chingón profesional en toda la palabra egresado de la Joe Kubert Art School [una de las primeras y mejores escuelas del mundo para hacer historieta]) y la verdad estamos muy emocionados en por fin trabajar juntos. El regreso de El Arsenal lo combino con mi onda cervecera”.


            Destacó que “no es mi intención anunciar ningún retiro, sólo un ‘cambio de velocidades y caminos’ para mi desarrollo personal y profesional. Un ‘por si estaban con el pendiente’. Seguiré apoyando y ayudando a la escena comiquera en la medida de mis posibilidades, y en las condiciones correctas cuando así se me requiera”. 

Imágenes cortesía de Mudo Martínez

lunes, 11 de julio de 2016

Los Picapiedra, Scooby, Los autos locos – más cabrones que nunca



La editorial estadunidense DC Comics apostó por traer al siglo XXI, en forma de historieta, caricaturas clásicas del estudio Hanna-Barbera creadas hace medio siglo. El resultado es divertido, y al menos incitador al escándalo para puristas que no aceptan el cambio y la puesta al día de los personajes clásicos.

La primera entrega de esta aventura editorial que DC puso a la venta hace poco menos de un mes fue Future Quest, una aventura que reúne a los héroes de acción Johnny Quest, El Fantasma del Espacio, Birdman, el Trío Galaxia, Los Herculoides y Los Imposibles. Escrita por Jeff Parker (guionista de las series Shazam!, Aquaman y Batman ‘66) y dibujada por Evan Doc Shaner (Flash Gordon), la serie presenta peripecias a través del tiempo y el espacio. Da algo más de profundidad a los personajes de lo que se ve en las caricaturas, pero de ahí en fuera, no es la gran cosa.



Los grandes cambios vinieron con Scooby-Doo Apocalypse, realizado a partir de diseños de Jim Lee, quien en la década de 1990 revitalizó a los X-Men y hoy es poco menos que un gurú de los cómics publicados por DC. Scooby, Shaggy, Velma, Fred y Daphne ya no son adolescentes con ínfulas de detectives, sino un grupo de aventureros que sin querer comienza una guerra contra una multinacional que realiza experimentos genéticos que puede desatar un apocalipsis de mutantes.



Scooby es un gran danés manipulado genéticamente y con accesorios tecnológicos fusionados a su cuerpo que le permiten comunicarse más y mejor que un perro normal. Shaggy ya no es un hippie con apariencia y actitudes de consumidor de mariguana, sino un científico hípster; Velma es un genio tecnológico incomprendido; Daphne es una periodista en busca de rating para su programa de investigación y Fred, su arrogante y medio menso camarógrafo.

Con guion de Keith Giffen y JM DeMatteis (Legión de Superhéroes, Liga de la Justicia Internacional), ilustrado por Howard Porter (Batman Beyond, Justice League 3000), los cambios no dan lugar para el humor que podría esperarse de la serie, que en su forma original era ante todo de aventuras cómicas. Aquí el humor se queda en el asiento de atrás, dando sitio a la seriedad que implica una amenaza de alcance mundial.



A continuación DC presentó Wacky Raceland, una puesta al día de la hilarante caricatura Los autos locos. En el original, un grupo de pilotos competían por un premio… sin más motivación que ganar el premio y ya. Ahora, quien gane las carreras podrá salir del páramo estéril en que se ha convertido la Tierra en el futuro, y llegar a un mítico sitio de abundancia y prosperidad.



Wacky Raceland presenta a Penélope Glamour, Pierre Nodoyuna, a Los Hermanos Macana y al resto de los corredores locos sobre poderosos autos… máquinas autoconscientes, que hablan y tienen personalidades, diseñadas nada menos que por Mark Sexton, quien colaboró en Mad Max: Furia en el camino. Penélope ya no es una damisela en desgracia, sino una cojonuda jovencita que puede sobrevivir por sí misma, y la Pandilla del Hormiguero, suerte de siete enanitos disfrazados de gángsters del Chicago de los 30s, son enanos mutantes de instintos asesinos.



Pierre Nodoyuna aún tiene a su perro Patán (aquí con implantes biotecnológicos) y a su potente Súper Ferrari… y aún no logra ganar carreras ni con sus marranadas en la pista. La serie es escrita por Ken Pontac, quien ha colaborado lo mismo para programas infantiles como Lazy Town, que en la horripilante y divertidísima Happy Tree Friends (animalitos que terminan en sus caricaturas eviscerados y/o hechos pedacitos), mientras que los dibujos son del argentino Leonardo Manco (Hellblazer).

Y al final, DC dejó a su Joya de la Corona, Los Picapiedra.



El guionista Mark Russell (Prez) y el dibujante Steve Pugh (Blade, Rogue Trooper) presentan a Pedro Picapiedra, su esposa Vilma, su compadre Pablo Mármol y a la esposita de éste, Beti, en una ciudad de Piedradura con tecnología basada en rocas y bichos prehistóricos, que incluyen adelantos como el cuernófono celular. Pedro es un asalariado con la obsesión de subir de nivel económico y social, incluso si eso implica abusar de cromagnones de pocas luces y gran poder físico, obligado por el implacable industrial Señor Rajuela. Las grúas impulsadas por el poder dinosaurios, los troncomóviles, todos los detalles están ahí puestos al día. Vilma no se conforma con ser ama de casa y busca desarrollarse como mujer y artista en ciernes, y la serie se da el lujo de ofrecer una crítica a la sociedad gringa actual, con todo y Pedro y Pablo como veteranos de guerra con remordimientos y dudas sobre sí mismos y sus acciones.



DC no parece obsesionada con destruir a los clásicos, sino actualizarlos para el público del siglo XXI. Ya si lo logra o no, eso lo decides tú.



Todas las imágenes son propiedad de DC Comics

lunes, 4 de julio de 2016

Tarzán, El Hombre Mito regresa con Harley Quinn



Este viernes se estrena en México La Leyenda de Tarzán, dirigida por David Yeates, quien se encargó de las últimas cuatro películas del maguito Harry Potter, estelarizada por Alexander Skarsgård como El Hombre Mono, con Samuel L. Jackson en el papel del soldado, jurista, político y clérigo de la vida real George Washington Williams; Christopher Waltz hace al villano Leon Rom, que pretende establecer un mercado de esclavos, para la gloria del Rey Leopoldo II de Bélgica; Djimon Hounsou es el jefe nativo Mbonga, y Margot Robbie, la Harley Queen que fue y será en Escuadrón Suicida ­­–que estará en cines en agosto próximo— hace de Jane.


            La crítica internacional ha hecho pedazos a la más reciente aventura del personaje creado por el escritor Edgar Rice Burroughs en 1912 para la revista All-American Magazine, y que un año después se publicó en libro.
            La Leyenda de Tarzán termina siendo una producción incoherente, que intenta complacer a todos y termina sin complacer a nadie”, afirmó el diario inglés The Guardian.
            De acuerdo con la revista Rolling Stone, “La Leyenda de Tarzán revienta de grandes ideas, animal contra humano, exploración contra explotación, primitivismo contra civilización. Es una pesada carga temática para que la maneje una sola película, especialmente esta, que casi se colapsa por su peso”.


            Más condescendiente es The Hollywood Reporter, que afirma “La Leyenda de Tarzán no es tan mala; realmente es muy buena. Hecha primorosamente e inteligentemente enclavada al principio de la rapaz colonización del Congo en la década de 1880 hecha por el rey belga Leopoldo II, es ciertamente la mejor película de Tarzán con actores en muchas décadas (lo que en realidad no es decir gran cosa) y ofrece un bien pensado equilibrio de acción vigorosa y drama suficientemente interesante”.
            Como siempre, la mejor opinión será la tuya, una vez que hayas visto la cinta, que pretende ofrecer una nueva visión del mito del buen salvaje, ya postulado por Tácito en el siglo I antes de la Era Cristiana, y que se ha reinventado una y otra vez, los mismo con Russeau que con su actual versión, producto de la imaginación del gringo Rice Burroughs, quien nunca salió de Estados Unidos y es capaz de poner leones en plena selva africana.


            El origen de Tarzán es retomado una vez más por le nueva película: Lord y Lady Greystoke, en misión diplomática para el Imperio Británico, terminan en la selva de África por un motín en el barco en el cual viajan, tienen a un niño y cuando ellos mueren, una tribu de simios cría a Tarzán, quien aprende a leer solito los libros de su padre en inglés y francés, es un atleta de nivel olímpico, halla a otros hombres blancos y se establece en Inglaterra como Lord John Clayton Tercero, Duque de Greystoke.
            La popularidad de Tarzán fue inmediata, e incluso sienta las bases para el superhéroe, con habilidades ora sí que superiores a las de los simples mortales, es un cazador habilidoso como él solo, ágil, diestro con sus tres armas principales, que son el venablo, una lanza corta, un lazo corredizo y el inefable, utilísimo cuchillo.
            La primera película de Tarzán se estrenó en 1918 y se publicó como cómic hasta 1929, ilustrado por Harold Foster, quien dejó la serie en manos de Burne Hogarth en 1937 para hacer otro gran personaje de los cómics, El Príncipe Valiente.


            Tarzán vivió emocionantes aventuras al mismo tiempo en las historietas, los libros y sobre todo el cine, en el que fue interpretado entre otros por Buster Crabbe, mejor conocido por hacer Flash Gordon, y especialmente por Johnny Weismüller, atleta olímpico igual que Crabbe. Tanto se identificó Weissmüller en el papel, que murió en Acapulco en 1984 demenciado, pegando gritos entre los árboles como El Señor de la Selva.


            En los sesentas, con la televisión ya consolidada como medio de comunicación, se filmó en los estudios Churubusco de la Ciudad de México la serie de Tarzán protagonizada por Ron Ely.
            El mejor Tarzán del cine hasta el momento ha sido, al menos según acá su Charrus enigmaticus, Chistopher Lambert, en Greystoke: La leyenda de Tarzán, rey de los simios, de 1984, con todo y Andie McDowell como su Jane.
            En la década de 1990 hubo una olvidable serie de tele, otra aún peor en 2003, y en 1999 los Estudios Disney hicieron una versión de dibujos animados casi tan apegada al original de las novelas como la de Greystoke con Lambert, con detalles como el que no anda de una liana a otra, sino que avanza por las ramas como un deportista extremo.


            Tarzán en los libros originales no es como en las películas clásicas, sino que es culto, habla francés, inglés y un poco de alemán, es lector, crítico de su entorno y defensor de su familia, compuesta por Jane, su hijo Jack conocido como Korak, que quiere decir “matador” en el idioma de los grandes simios que adoptaron a Tarzán y le pusieron su nombre, que significa Mono Blanco.
            Tarzán es la fuerza del orden encarnado en una tierra indómita y sin ley, pero no por sí mismo un promotor del imperialismo como postuló la doctora Irene Herner en su obra fundamental Tarzán El Hombre Mito, publicada por el Fondo de Cultura Económica, quien aceptó en una conferencia que la escribió “mirando infiltración ideológica bajo la cama”.


            Tarzán es en esencia todo lo que un hombre puede ser, con bases éticas sólidas y un impulso por conservar el orden y hacer el bien. Esto lo hace vigente para el siglo XXI.

Todas las imágenes pertenecen a sus respectivos dueños,
y se ofrecen sólo con fines periodísticos y de información.