lunes, 28 de diciembre de 2015

Yucatán: Trova, cochinita y cómics en la red



Cuando pensamos en Yucatán saltan de inmediato a la mente su cultura ancestral y moderna; la cultura maya que convive con la investigación en diversas áreas de la ciencia. En su gastronomía inquietante, que hace de cada comida un festival de aventuras de sabor. En su trova, poemas engarzados en melodías irresistibles. En su gente amable, generosa y honesta.
                En el siglo XXI Yucatán es todo lo anterior y más, es hoy la tierra de origen de divertidos cómics en línea.
                Sebastian Carrillo, Bachan, profesional de la ilustración desde 1989 –año en que empezó a publicar sus monos en las revistas Joyas de la literatura y Novelas inmortales de Novedades Editores dirigidas por el gran Remy Bastién—, dejó hace casi un año la violencia y el caos de la capital del paìs y se avecindó en Mérida. Con guiones de Maritza Campos, realiza Power nap, las aventuras surrealistas cyberpunk de un oficinista que mal sobrevive a un mundo burocrático de pesadilla.


                Bachan creó hace más de 25 años al inigualable Bulbo, un superhéroe netamente mexicano, e ilustró la historieta de fantasía y acción Imagine agents para la editorial estadunidense BOOM!, de la cual está por producirse una película. Entre otros trabajos ha realizado el hiperviolento y comiquísimo Vinnie, el perro de la Balbuena.


                Maritza, su cómplice en Power nap y nativa yucateca (Bach es yucahuach, nació en la ciudad de México y su mamá en Yucatán), es a su vez realizadora de las tiras de humor College roomies from hellCompañeros de cuarto universitario del infierno, puex—. Ambas series son muy gustadas y conocidas fuera de México.


                Expresando una veta guarra y desmadrosa, el diseñador Sergio Neri produce La tuya en vinagre en La tierra del faisán y del venado. Léase a riesgo de ofenderse, y de botarse de risa. Sergio actualmente promueve un proyecto para publicar en papel su libro El Lobasutra, y realiza la serie de dibujos animados Los Keloides, misma que no niega sus influencias en el trabajo de John Kicfalusi (creador de Ren y Stimpy), y entrega un humor de risa loca, digno heredero del teatro regional yucateco de Héctor Cholo Herrera.


                No poco menos gracioso es Bunsen, joven clásico de Jorge Pinto, quien se ha alejado recientemente de la tira en la red ilustrar el libro Manual del Godínez –que presenta la vida y tiempos de los oficinistas mexicanos del siglo XXI—, original del vlogger Chumel Torres.


               

lunes, 21 de diciembre de 2015

Skywalker a través del espejo (Los motivos del Wampa)



Pus ya vi La guerra de las galaxias: El despertar de La Fuerza.
Hace 38 años, George Lucas me llevó a una galaxia muy, muy lejana donde le partí su máuser a un enemigo cabronsísimo y a sus huestes descerebradas, al lado de entrañables compañeros de aventuras.


Los klínex que pasaban por pantallas en las cajas de cerillos que eran los Multicinemas de Plaza Universidad me trajeron nuevos amigos: Un güero inexperto, medio menso pero entrón; un canijo fogueado en mil tiros con la ley y los pasados de lanza, que manejaba a la nave Halcón milenario, con la cual recorrió La Ruta de Kessel en un récord de 12 parsecs; su valedor del machín, un chango/Sancho Panza/Porthos, gigante peludo émulo del fiel compañero nativo americano Toro; la princesita que no se rajaba a la hora de los cates; un sabio avezado en los Misterios de La Fuerza…
Ah, y unos robots que hacían de hacían de graciosos shakespeareanos-Matashichi y Tahei-Fernando Soto Mantequilla-Armando Soto La Marina El Chicote en Star Wars, el bonito y sabroso puchero que entre otros ingredientes mezcla La fortaleza prohibida de Kurosawa (1958) con las aventuras espaciales de Flash Gordon (creado para el cómic por Alex Raymond en 1934), novelas de caballería y un análisis microscópico del ensayo de Joseph Campbell El héroe de las mil caras (1949).


Vi surgir un monstruo de la mercadotecnia, primero con dos tres monos chidos que hoy es un diluvio que va de chones a charolas de hielo con forma de Han Solo congelado en carbonita.
Leí la pedorrísima El ojo de la mente, las aventuras de Lucas Trotacielos en las selvas del planeta Mimban contadas por Alan Dean Foster (1978); los cómics Marvel muy bien escritos por guionistas de la talla de Chris Claremont –autor de las historietas clásicas de los X-Men Días de futuro pasado y Saga de Fénix Oscura, entre otras—, que entre otros ilustraron Carmine Infantino (dibujante mejor conocido por su trabajo en la editorial DC) y Walter Simonson (Thor).


Hoy Marvel, en manos del emporio de comunicaciones Disney lo mismo que el Universo Star Wars, publica nuevos, padrísimos cómics de La guerra las galaxias luego de que las historietas estuvieron a cargo de la editorial Dark Horse entre los noventas y principios de los dosmiles.
Gracias a las cintas Beta y VHS, luego al devedé y al blurey, recito capítulo y versículo de los Episodios IV al VI de la saga de la familia Skywalker.
Vi surgir el bonito Universo Expandido de Star Wars, relatos de Luke Skywalker et al en novelas, en las ya mencionadas historietas de editorial Dark Horse, así como en juegos de rol y video, que fueron borrados como “historia oficial” en 2012, cuando Disney compró la franquicia a Lucas en más de 4 mil millones de dólares.


A fines de la década de 1990 me chuté las quesque “ediciones especiales” plagadas de pegotes digitales, con Han Solo disparando después de Greedo el cazarrecompensas en la cantina de Mos Eisley, no abaratándoselo; con una rola bien diferente y bien gacha en el palacio de Jabba, con celebraciones mamucas ante la caída del Imperio, en lugar de la canción de los ositos una vez concluida La Batalla de Endor.
Vi los tapices digitales con los que Lucas pretendió contar con más pedos que gloria el origen, surgimiento y caída de Anakin Skywalker, el nacimiento de Darth Vader, la huída de Yoda al caer la República.
Y me acabo de refinar La guerra de las galaxias: El despertar de La Fuerza.


Lewis Carrol arrojó a Alicia a través del espejo, hoy el director Jeffrey Jacob Abrams hace pasar a sus personajes por un relato que refleja paso a paso la fórmula del nacimiento, aprendizaje y triunfo del héroe, igualito a La guerra de las galaxias: Una nueva esperanza con todo y robotito simpático, con todo y planeta desértico, su arma capaz de destruir planetas, su muertito en la estación de los malos antes de la batalla final, el arma de los villanos que se destruye con un tiro preciso…


No vi nada que no viera antes. Muy bien hecho, muy bien contado, con la Princesa Leia arrastrando las frases como si se hubiera echado sus chupirules entre tomas.
Con Daniel Craig el 007 como el stormtrooper al que la niña Rey (jedi que fue y será) le hace coco wash, con las voces de Ewan McGregor y Alec Guiness como el mairo Kenobi, con la voz de Frank Oz como el Maestro Yoda que se escuchan al momento que Rey toma el sable de Skywalker… Con el bonito guiño a Apocalipsis ahora (Coppola, 1979).


No vi nada nuevo. A ver si en la próxima entrega, Disney tiene la decencia de ofrecer un producto nuevo. Ese Ratón Mickey, ese Abrams, me quedan a deber. Espero que salden su cuenta en mayo de 2017, pa cuando tienen programado el Episodio VIII.

El copyright del poster y fotografías pertenecen a las correspondientes productoras y/o distribuidoras.




martes, 15 de diciembre de 2015

Tarzán vuelve al cine – y los Hombres X, y también los cómics europeos

La industria cinematográfica estadunidense, esa fábrica de sueños y pesadillas que vomita mucha mierda y de pronto escupe diamantes en forma de avances narrativos, de introspección a la naturaleza humana, de buen entretenimiento, parece incapaz de alejarse del cómic en su cacería de contenidos.
Apenas la semana anterior nos ocupábamos de próximas producciones basadas en historietas, cuando se presentaron en la prensa de Estados Unidos las primeras imágenes de The legend of Tarzan (“La leyenda de Tarzán”), una versión nueva del relato clásico del Rey de los monos original de Edgar Rice Burroghs, que surgió en novelas en prosa (1912), pasó al cine en 1918 y desde 1929 es protagonista de cómics, primero con arte de Harold Foster (creador del Príncipe Valiente), luego de Burne Hogarth y posteriormente con dibujos de una legión de genios, incluidos el mexicano Sealtiel Alatriste Batalla.


El galán de la serie de televisión True Blood, Alexander Skarsgård, hará la parte de Tarzán (alias John Clayton, vizconde de Graystoke), quien en esta entrega dejó la jungla africana hace unos años para avecindarse en Inglaterra, e invitado por el Parlamento Británico para una misión comercial, El Señor de la Selva viaja con su esposa la gringa Jane Porter (Margot Robbie) al Congo, donde se vuelve peón en un plan del villano Leon Rom (Christoph Waltz).

También aparece Samuel L. Jackson, genial actor declarado fan de la historieta y quien ya ha encarnado al Maestro Mace Windu en la saga de La guerra de las galaxias, así como a Nick Fury en el Universo Cinematográfico basado en los cómics Marvel. También actuará Djimon Hounsou, otro muy buen histrión y que igualmente se ha acercado al cine basado en monitos: fue Korath El Perseguidor en Guardianes de la galaxia (James Gunn, 2014).

Poco después del estreno de The legend of Tarzan (al momento programado en México para el 7 de julio de 2016), la señorita Robbie será la simpática y a la vez temible, peligrosa loquita Harley Queen –novia de El Guasón, enemigo de Batman— en Escuadrón suicida, a presentarse el 4 de agosto de 2016 en pantallas mexicanas.

El director de las nuevas aventuras de Tarzán es David Yates, quien se encargó de las últimas cuatro cintas basadas en la serie de novelas del mago Harry Potter.

Y a propósito de directores europeos, Luc Bresson dio a conocer que su próximo proyecto para el cine será una adaptación de la historieta franco-belga Valérian: agente espacio-temporal, creada en 1967 para la revista Pilote por el guionista Pierre Christin y el dibujante Jean-Claude Mezières. Se espera que la cinta se estrene en verano de 2017.

 
Bresson no es ningún desconocido en la llamada Space Opera, las aventuras en el espacio, pues. En 1997 nos trajo El quinto elemento, y si en este filme pudo hacer actuar (o casi) a la preciosa Milla Jovovich, sin duda arrancará más que expresiones en Valérian y la ciudad de mil planetas al precioso maniquí Cara Delevingne, quien pretende alejarse de su faceta de modelo y hacerse actriz.

La Delevingne, quien hará el papel de Laureline (mientras que Dane DeHaan, el Duende Verde en Hombre Araña 2: La amenaza de Electro, será Valérian) ya hizo un papel en Ciudades de papel (Jake Schreier, 2015), y interpretará a la villana de los cuentos de la editorial DC La Hechicera en la arriba mencionada Escuadrón suicida.


 Por si fueran pocas las nuevas acotaciones en la agenda cinematográfica/comiquera para el año entrante, se presentó el primer corto de X-Men: Apocalipsis, entrega en la saga de los superhéroes mutantes creados por Stan Lee y Jack Kirby para Marvel Comics.


En la película con fecha de estreno 19 de mayo próximo, Los hijos del átomo encabezados por el telépata Charles Xavier combatirán a un enemigo inmortal que busca aniquilar a la especie que se hace llamar humana. El productor es Brian Singer, quien se ha encargado de las películas de los mutantes de las historietas presentadas por 20th Century Fox… y entre otros trabajos también produjo la serie de tele Doctor House (2004-2012) e incluso dirigió la decepcionante Supermán regresa (2006).
MISCELÁNEA COMIQUERA
Este domingo 20 de diciembre se celebrarán las quince primaveras del Museo de la Caricatura y la Historieta Joaquín Cervantes Bassoco, que es encabezado por el monero Rubén Eduardo Soto Díaz. La fiesta por el 15 aniversario se realizará de las 11 a las 14 horas en las nuevas instalaciones del museo, la casa de Cultura de Anenecuilco Coronel Francisco Franco Salazar, en la calle Libertad sin número del municipio de Ayala, Morelos.

martes, 8 de diciembre de 2015

Batman, Los Vengadores… Los cómics dominan el cine



Los aficionados a la historieta estamos brincando de contento desde hace un par de semanas. No es para menos, se presentaron los cortos cinematográficos (trailers, les dicen en inglés) de Batman contra Superman, con los héroes de la editorial estadunidense DC Comics, y de Capitán América: Guerra Civil, en la cual los personajes de Marvel combatirán entre sí.

 
            Estamos muy lejos de aquella década de 1980, en los que la oferta de historieta nacional comenzaba a caer, pero aún llenaba los puestos de periódicos. En esos años podíamos leer cómics gringos traducidos al español, Editorial Novaro reproducía los originales de DC por montones y Grupo Novedades Editores hacía lo propio con Marvel, si bien la primera también presentaba Hulk y Conan.

            De pronto, Novaro cerró a mediados de los ochentas, incapaz de mantener sus pagos en dólares debido a las brutales devaluaciones del peso. Novedades, que publicaba Hombre Araña, 4 Fantásticos, Vengadores, Pólvora y Puños, así como Diabólico (el superhéroe ciego Daredevil), sólo pudo seguir con la serie del trapamuros.

 
            Ahí surgimos una generación a quien el experto en historieta y promotor de eventos comiqueros, Luis Gantus, llama Los huérfanos de Novaro. Lectores que nos quedamos sin una parte de la gran oferta de cómics que disfrutábamos, al mismo tiempo que la historieta mexicana se canibalizaba a sí misma al surgir los sensacionales, cuentos populacheros muy bien dibujados, con relatos mínimos, intercambiables de una serie a otra.
            Hoy estamos en un universo muy diferente. Para quien desee cómic gringo ahí están las tiendas especializadas; la historieta mexicana ya sin industria pero libre y fuerte, salió de los kioscos para avecindarse en las redes electrónicas y las librerías (comemos pastel, porque bolillo ya no hacen), y el cómic del resto del mundo es accesible en internet sabiendo buscarle.

            Mientras, la historieta es la gran fuente de contenidos para el cine y la televisión de Estados Unidos. Además que el próximo 25 de diciembre se estrena Carlitos y Snoopy, al momento se espera Escuadrón Suicida (con villanos como la desquiciada Harley Quinn, programada para agosto de 2016), y miramos en la tele de paga Supergirl, Flash, Arrow (Flecha Verde), Leyendas del mañana (héroes de DC como El Átomo, Firestorm –llamado Antorcha en los cuentos de Novaro—, El Hombre y la Mujer Halcón contra el villano inmortal Vándalo Salvaje) Daredevil, Jessica Jones y cuanto se acumule.
            Hoy, aunque la próxima reina de la taquilla es La guerra de las galaxias: El despertar de La Fuerza, el interés y la discusión se centran en Batman contra Superman y Capitán América: Guerra Civil. Que si La Mujer Maravilla no da el ancho, que si ese Lex Luthor es hípster, que está muy forzado incluir a Doomsday, la criatura que mató a Superman en los cómics… Y del lado Marvel, que son bien poquitos los del bando del Hombre de Hierro y menos los del lado de Capitán, que qué padre está la Pantera Negra, pero qué diablos va a hacer en la historia, que dónde está el Hombre Araña, que supuestamente se integra al Universo Cinematográfico de Marvel…


             A nadie se da gusto. Y sin ver las cintas, menos. No nos queda sino esperar a que Bats y sus compañeros en las páginas de DC salten a la pantalla grande en marzo próximo, y que la Guerra Civil entre héroes Marvel ocurra en mayo entrante.
MISCELÁNEA COMIQUERA
El próximo 12 de diciembre Rubén Armenta, aficionado a la historieta, realizador de cortos cinematográficos de horror, comentarista de cine y enfadoso de tiempo completo, presentará su cómic El Monito al desnudo, una compilación de cuentos realizados por diversos autores, con portada de José Quintero (creador de Buba). La cita es a las 12 del día en la tienda Comics México (avenida Revolución número 50, en la colonia Escandón del DF, a cuadra y media de Benjamín Franklin y del Metrobús Universidad la Salle). Como invitados especiales asistirán Edgar Clement (autor de Operación Bolívar) y Carlos Lobo Cuevas, entintador en Marvel.

            También el 12 de diciembre se cumple un año de la muerte de Víctor Bustos, comentarista cinematográfico entusiasta del cómic, miembro de la mítica Hermandad de Historietistas que fundó Antonio Gutiérrez, ilustrador de Lágrimas y risas. Se extraña su oficio y profesionalismo, así como su buen decir.
            Y gracias a Juanele, quien realizó la ilustración que encabeza este bló, con su personaje Patote a la izquierda. ¡Gracias y un abrazo, Maestro!